CUANDO LAS COSAS SE HACEN DE CORAZON

Diremos que una "cosa hecha de corazón" es aquella que se hace sin desear, ni querer buscar adrede mal para otros, aunque finalmente ese "mal" desintencionado se llegue a producir. Y es que ocurre que, a veces, al hacer esa "cosa" no se piensa en el posible daño que se le puede estar haciendo al otro. Simplemente se piensa en que es lo mejor. Se trata de un daño comprensible, que se salva en el mismo momento en que el dañado piensa en la nula mala intención del hecho. Ocurre, no obstante, que la sociedad del "YO" en que vivimos, nos impide tener ese pensamiento. Entonces se desencadena una tormenta en la que el dañado exige rectificación, cuando no toma medidas para crear malestar en el que le dañó y el que dañó no entiende, por más que lo reflexiona, como se puede producir tal reacción ante algo que "ha hecho de corazón". Estamos en Cuaresma. Esta situación se va a producir en muchas ocasiones, entre nosotros los cofrades, pues nos vamos a ver más a menudo en el seno de la Cofradía que nos une. Pensemos de verdad en esto. Pensemos en como se ha llegado a producir ese hecho que tanto nos ha molestado, antes de emprender ninguna acción ofensiva, no vaya a ser que el otro sólo quisiera alcanzar una meta que, por otra parte, sea mi misma meta y en lugar de ello, ambos alcancemos todo lo contrario. Además, ser cristiano significa estar dispuesto a perdonar constantemente. Los cristiano debemos ser un modelo en esto. Pensemos en esto durante estos días de caminar hacía la Semana Santa.