El pasado sábado 16 de marzo tenía lugar en el Auditorio Municipal el Pregón de Semana Santa 2013, que hizo el trinitario Vicente Elipe, sustituyendo al Cardenal Emérito de Sevilla Monseñor Carlos Amigo, quien por estar en Roma paricipando en el cónclave y primeros actos del Papa Francisco, no pudo asumir su compromiso.
Comenzó el acto con la intervención del Alcalde de Alcázar de San Juan, Diego Ortega, quien animó y reconoció el trabajo de los cofrades para no sólo vivir intensamente la Semana Santa, sino además hacerla cada vez más bibrante y atrayente.
Tomó después la palabra el Consiliario de la Junta Local de Cofradías y Hermandades, el Padre Jesús Herrera, para hablar, a modo de introducción del Pregón, de los días que vamos a vivir diciendo que se vivan desde la fe y la caridad.
Y llegó el turno al pregonero. El padre Vicente Elipe, conocido por su gran oratoria que una vez más dejó bien patente, dedicándolo a sus padres.
Buen conocedor de Alcázar y de su Semana Santa fue desgranando uno a uno los días que más se viven y celebran en nuestra semana grande, comenzando el Viernes de Dolores y los Besamanos a las Dolorosas y finalizando el Domingo de Resurrección, recorriendo todas las procesiones que se celebran, halagando con frases llenas de gran contenido cristiano, el trabajo y la función de cada hermandad.
Del Viernes de Dolores dijo que si comprendiesen el dolor de una Madre, aquellos hombres de Jerusalen habrían construido un muro para que María no hubiese vivido el dolor de todo aquel sufrimiento.
Domingo de Ramos, de gran recibimiento a Jesús, entrando humildemente en Jerusalen con palmas agitadas al viento, para por la tarde como representa la Hermandad de la Salud verlo cargado con la cruz de nuestras faltas y las lágrimas del rostro dulce de María por tal causa.
Martes Santo con el Cristo de la Buena Muerte, consumación de la traición y la negativa del hombre.
Miércoles Santo, Vía Crucis lleno de profundidad y reflexión con el Cristo de la Expiación, en silencio y solemnidad que impresionan.
Jueves Santo de celebración de la Última Cena del Señor, del lavatorio de piés... Santos Oficios en todas las Iglesias de Alcázar.
Jueves Santo de la Oración en el Huerto, con los apóstoles que son incapaces de velar a Jesús mientras habla al Padre de lo que va a pasar... La misma noche en la que la Verónica, representada en el Paso de Jesús Caído enjugará el rostro de Jesús, deteniéndose en el gesto de aquella mujer de compasión y ayuda. Y la Dolorosa de San Francisco contemplará todo aquello.
Jueves Santo tamibén de visitia a los Monumentos que se preparan en las 8 capillas e Iglesias de Alcázar...
Viernes Santo, Alcázar desde la madrugada espera a Jesús Nazareno y la Virgen de los Dolores. Las cornetas y tambores despiertan al pueblo que acude al Pretil de la Trinidad a verlos salir a la calle. El pueblo que les acompaña también en el Altozano en su Encuentro. Una procesión que simboliza el camino de Jesús a la Muerte y el dolor insufrible de una Madre que lo tiene que contemplar todo.
En la tarde los Oficios del Viernes Santo conmemorarán la muerte mas injusta de toda la historia...
Por la noche el Santo Entierro con gran solemnidad y fuerza saldrá a la calle para mostrarnos el cuerpo sin vida de Jesús, un Jesús que en lugar de morir, duerme en la esperanza de la Resurrección. Y una madre de Soledad que enlutada va detrás, rota de dolor. Como rota de dolor saldrá también de Santa Quiteria la Soledad a recorrer en silencio las calles de Alcázar, sóla, ya sin su amado Hijo.
Sábado Santo, la desesperanza de los apóstoles, los discípulos de Emaús abatidos y, sin embargo, por la noche de Vigilia Pascual volverá Jesús a la vida, en la celebración de celebraciones, entroncada con la creación, los anuncios que sobre Él hicieron los profetas... Vuelta a la luz
Y llega el Domingo de Resurrección, el Santo Entierro con la Imagen del Resucitado que, dijo "de gran belleza y movimiento" representará el triunfo de la vida. Los nazarenos ya no llevarán el capuz de penitentes y la Madre, ya sin el luto, verá a su Hijo caminar por las calles de Alcázar...
Un Pregón que rigó en torno al hecho de que Jesús se hizo hombre y se entregó por amor, un sacrificio que está vivo aún hoy.
Tras la gran ovación que recibió el padre Vicente Elipe, la presidenta de la Junta Local de Cofradías, Toñi Cortés tomó la palabra para agradecer al padre Vicente su disposición y esfuerzo por el hecho de que con dos semanas de antelación, aceptase ser el pregonero, siendo además el que menos publicidad ha podido tener.
Y llegó el turno de los reconocimientos, entregándose un detalle al Pregonero, otro a Don Antonio Paniagua, Presidente de la Cofradía del Cristo de la Expiación por ser la persona que más tiempo lleva formando parte de la Junta Local de Cofradías, otro al Consiliario de la Junta Local de Cofradías, Padre Jesús Herrera y por último uno a la periodista Ana Isabel Romero Abengózar que presentó todo el acto.
Para cerrar el acto y tras un breve descanso la Banda de Música de Alcázar de San Juan interpretó con la maestría con que viene haciéndolo últimamente las Marchas de Semana Santa "Triana de Esperanza", "Banceros de la Pasión", "Mektub", "Madre Hiniesta", "La Macarena", "La Madrugá" y "Saeta", regalando al respetable el pasodoble de gran tradición en la Semana Santa levantina "Mantilla en Jueves Santo".
Sorprendente, novedosa y hemosa decoración floral del escenario por parte de Las Flores de Prado, destacando el centro de flores que pendía del techo durante la actuación de la Banda de Música de Alcázar de San Juan.
Sorprendente, novedosa y hemosa decoración floral del escenario por parte de Las Flores de Prado, destacando el centro de flores que pendía del techo durante la actuación de la Banda de Música de Alcázar de San Juan.
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